Los perros no solamente cumplen la función de ser nuestros amigos, nuestros compañeros. Ellos además de cumplir con esta función siguen manteniendo intactas sus cualidades dentro de los roles que cumplen en una jauría.

La dominancia, el imponer su fortaleza también es parte de lo cotidiano y pueden llegar a trabarse en luchas y peleas que nos producen mucho miedo.

En estado salvaje esto es muy común, pero en casa es un verdadero problema para nosotros sino sabemos como actuar con la inmediatez y el cuidado para no salir lastimados.

Cuando los animales se encuentran en estado de ira, no es una buena idea interponer las manos o brazos entre ellos, para intentar poner fin a la pelea. Cuando nosotros nos enojamos, a veces a veces nos cegamos por la rabia y a los perros les pasa lo mismo, por lo cual no debemos exponer nuestra integridad. No es que tus perros no te quieran, sino que están concentrados en demostrar cuál es más poderoso, desde su propio instinto.

Los perros detectan la inseguridad y el miedo, es por eso que necesitas mantener la calma y demostrarles firmeza, pero sin levantar la voz. Si detectás que están provocándose o por comenzar una pelea, enseguida separalos y no te muestres ansioso, sino como algo natural.

Aunque creas que es por su bien, si optas por tirar de su collares mientras se pelean, es posible que les causes algún tipo de daño y además es posible que al tirarles no sólo empeores las cosas, sino que además incrementes su nivel de agresividad, lo cual podría llevar a que salgas lastimado  por accidente.

En algunos casos el lanzarles una tela o frazada a los perros, mientras se están agrediendo, suele ser la solución ya que dejan de verse y eso les permite disminuir sus niveles de ira.

Por alguna razón el agua fría los descoloca. Es por eso que una de las mejores formas para detener una pelea de perros es mojándolos con agua fría. Usa una manguera para mojarlos, ya que el flujo de agua es más constante y potente.

Si logras sacar a tus perros de esa situación de estrés, llevando su atención hacia otro lugar o cosa, entonces tu afán por separarlos habrá funcionado. Un método útil para hacerlo es hacer algún ruido fuera de lo común, sin que ellos te vean, para que su curiosidad sea más fuerte y abandonen la pelea, poniendo toda su atención en encontrar la fuente de ese sonido.

Para evitar o reducir al mínimo las peleas entre tus perros, no crees situaciones en donde los hagas competir, demuéstrales tu afecto por igual, acostúmbralos a que compartan juntos y sobre todo, refuerza de manera positiva las conductas en donde tus perros logren comportarse como un equipo, pertenecientes a una sola familia.

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